Con cuidado y cariño, es decir con el pulso con el que hay que contar las historias que importan, este libro nos imbuye de lleno en la vida de Kid Tunero (1910-1992), también conocido como «el caballero del ring», el «campeón del mundo sin corona» o «el hombre de un solo golpe». Pero más que la biografía de un hombre único, estamos ante el relato de toda una época: un momento importante de la historia del boxeo en el siglo xx, con su parte de espectáculo pugilístico y su contraparte de lucha contra el racismo. Y de fondo, el dibujo del ambiente boxístico de Barcelona y otros puntos de la península, así como de Cuba y de Francia.
Kid Tunero, el caballero del ring encierra algo más que un relato meramente deportivo. Y es también algo más que la historia de quien fuera preparador de los campeones mundiales José Legrá y Alfredo Evangelista: es el retrato de la calidad humana de su protagonista. Las palabras del escritor Ernest Hemingway —que sentía por su amigo Kid Tunero un amor especial— lo dejan claro: «Kid Tunero es para mí el atleta más completo que ha dado Cuba. Un día diré por qué. Además, si aún quedan caballeros en la Tierra, Tunero es uno de ellos. Recto, lacónico, sencillo; es simple y puro como el pan, como el oro».
[…] Cada combate es un drama. Un diálogo definitivo a puñetazos. La vida de un boxeador es un relato excepcional, a cara descubierta, contra la Historia. Una batalla solitaria, de lobo estepario, que condensa y expresa la secular rabia colectiva de lucha racial y de clase. En Kid Tunero hay más aún. No es fácil de expresar con palabras. Es una actitud, un mundo, un universo. El instinto fulminante, irrepetible, de un instante. El todo en un puñetazo. En una sílaba. La síntesis perfecta. […]